Nos hemos criado en una sociedad donde nos han educado con la creencia de que "la competición es buena y forma parte del poder vivir mejor en este sistema". Competir te ayuda a ser lo mejor de ti mismo, a superarte, a aprender lo que es la vida. El competir es parte de llegar a ser un triunfador, tener éxito, ser más espabilado y más capaces que los demás porque sino nos pisarán. Cuántos de nosotr@s no hemos oido estas afirmaciones alguna vez?
Luego crecemos y son contadas ocasiones en las que nuestra edad o posición no son importantes. De nuevo seguimos compitiendo. Competimos ya sea por una posición mejor dentro del mercado laboral o por una plaza del parking en el centro comercial.
Competimos continuamente? Me pregunto yo. Y la respuesta que tengo es: Competimos en aquellas situaciones en las que tenemos miedo y nos falta iniciativa.
Aquellos que pueden hacen! Aquellos que no pueden o no se atreven se comparan!
Cómo dejar de competir? Creo que escribiré un post específico del tema en otro momento, pero ahí dejo una pista: con iniciativa.
Cada desafío que aceptes, cada problema que resuelvas requerirá de una iniciativa personal y la iniciativa genera confianza en uno mismo.
También puedes seguir teniendo la iniciativa de seguir compitiendo, pero me temo que los resultados que obtengas serán algo diferentes por lo menos en el nivel de paz interior y consumo de energúa. Toma la iniciativa para ser tú mismo quien fijes tus propias reglas y nadie más.
"La iniciativa es la cualidad natural de una mente libre " Willard and Marguerite Beecher.
Cuándo fue la última vez que competiste por algo? Cuál era la razón? Sentias miedo?
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Hola, Verónica:
ResponderEliminarA mí me gusta establecer por mí mismo el grado de competición. Me explico: el grado del contrario no es para mí más que un indicador, una línea de referencia. Yo sitúo mi grado, mi nivel, por encima o por debajo de lo que el otro muestra pero sólo en cuanto a grado comparativo. De esa forma establezco mi competencia (¿no es la competición una comparativa de competencias?). Otra cosa es que no ejerza lo que tú recomiendas: la aceptación. Cuando no acepto, la competencia/competición pasa de ser una relación comparativa a una relación de confrontación (si acepto, comparo y extraigo conclusiones constructivas; si no acepto, confronto y -vaya por Dios- las conclusiones suelen ser negativas).
Por eso creo en la competencia comparativa con indicadores aceptados, positivos y concluyentes. Y, por supuesto, convertibles en motivación.
(Oye, qué buenos son estos sitios donde uno se despacha a gusto; si en casa me pongo a soltar estas reflexiones, pensarán que me he tomado algo, te lo aseguro).
Un saludo, Verónica.
Entonces, si no he entendido mal, la competición es algo así como un segundo premio. Algo así como "vale, no me atrevo a cantar en público", que es lo que me gustaría pero al menos corro más que nosequién"
ResponderEliminarmadre mia te voy a postear en un post antiguissimoo...jajajajajja
ResponderEliminarpero es que tengo q comentarte algo, creo q soy de las pocas, por no decir la unica persona que conozco que no soy nada competitiva...un poco comparativa si...pero copetitiva...nunca jamas en nada...nunca lo he sido en ningun sentido de la vida, ni he querido nunca ser mejor que nadie ni correr mas que nadie, ni ganar mas que nadie...solo me limito a experimentar la experiencia... pero para mi la competencia es algo absurdo para aceptar que somos buenos en algo, y creo que no hace falta competir para saber que eres bueno en algo. bueno no se si me estoy explicandoo, jajajjaa, simplemente que es un tema que siempre me ha sorprendido la mayoria de gente es competitiva...y yo me pregutno...pq¿? no lo acabo de entender, de que nos sirve saber q somos mejores que otro¿? sentirnos bien con nosotros mismos¿? pero creo q es algo absurdo, seguro q hay alguien que sera mejor.Claro ho eso nos hacen creer, pq lo de mejor y peor muchas veces es relativo...uufff
un tema muy amplioo donde podria debatir durante un buen rato!!!!
me ha encantado ese temaa!!!!