El por qué ser perfeccionista no es tan perfecto





Todo el mundo suele ser perfeccionista. Cada uno a su manera y con sus cosas pero todos lo somos. Yo también. 


En cada uno de mis talleres siempre sale algún tema que nos hace reflexionar durante todo el mes. Temas que nacen al retar nuestra forma de pensar. Al jugar.

Esta vez y durante el mes de Enero en el taller de fotografía +perspectiva la "perfección" ha sido nuestro tema favorito. Favorito y muy recurrente, la verdad.

Nada es bueno ni malo por sí mism@. El problema es cuando confundimos la búsqueda de la excelencia, de la armonía con la perfección. Una búsqueda que nos separa de ser lo mejor de nosotr@s mism@s. Una búsqueda que si no se para a tiempo suele generar frustración, baja autoestima, estrés y que nos hace incluso quedarnos estancad@s. 

El problema no es aspirar a las cosas bien hechas. No estoy diciendo nada de eso. Buscar la armonía, cuidar el detalle, poner amor a las cosas que hacemos es algo muy grande y valioso. El verdadero problema es cuando ese "deseo de perfección" se convierte en una obsesión. Cuando llega al punto de no aceptarnos a nosotr@s mism@s ni a los demás porque no "encaja" en lo que pensamos o deseamos que fuera. 


¿Sabes lo que yo hago cuando mi deseo de perfección está llegando demasiado lejos? 

-Ser consciente- 
Es muy importante reconocer cuando estamos llegando a ese punto de parálisis por querer que todo sea magnífico y estupendo.

-Apelar a la paciencia-
Vamos a ver, ¿qué es lo que quiero conseguir? ¿es necesario que siga dándole vueltas a lo mismo? Hay veces que las cosas llevan su tiempo y no salen a la primera...¿por qué frustrarme con ello? 

-Recordar lo importante que es disfrutar del proceso-
Obtener resultados es fabuloso pero si no disfrutamos de lo que hacemos en cada momento todo lo que consigamos nos sabrá a poco. 

-Descansar-
Dejarlo todo. Dedicarme a otras cosas. No presionarme. Ser buena conmigo y darme el espacio y el tiempo necesario. Sin juzgarme. 

***
No siento que haya que buscar la perfección en nuestras vidas. Ya somos perfectos. En realidad, es en todas esas imperfecciones que vemos en nosotr@s donde yo veo tu perfección y la mía.

17 comentarios:

  1. Siempre tan acertada....

    Me pregunto como eres capaz de poner estos articulos siempre en el momento que los necesito...

    Un abrazo creadora de perlas.

    ResponderEliminar
  2. Uff!!!!!! que acertado tu post! Gracias!
    Te leo siempre, aunque no comente, y me encanta tu blog!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. pues me encanta que hayas comentado!! gracias por estar ahí!! Un abrazo!!

      Eliminar
  3. Solemos ponernos la capa de Superman, y jugar a que la perfección es una gran cualidad,cuando, como tu dices a veces nos lleva ala baja autoestima y frustracion. Hermosas fotos! veronica

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Exactamente!! Los superhéroes!! Muchas gracias por tu comentario bioplanning!! Un abrazo y encantadísima de que te gusten mis fotos!!!

      Espero verte por aquí de nuevo!!

      Eliminar
  4. Recurrente tema..., es agradable que de vez en cuando "alguien" nos diga que no lo estamos haciendo mal de todo...aunque sea con un artículo como este. Creo que querer "la perfección" es bueno pero sin volverse "maniáticos"...porque entonces nos hace no "estar conformes NUNCA" y....eso ya no es muy bueno. Otra cosa que veo...es que no se puede comparar constantemente las virtudes de uno mismo o sus trabajos con los de otros...porque nos hace creer que "lo del otro es mejor"....cuando no tiene porqué. Lo asocio también a ese grado de perfeccionismo....hay que tener cuidado. Una cosa que hago yo...es hacerlo en versión "EN-BRUTO"y luego voy mejorando. Hay que quererse un poco más!!! (lo digo por mí...sobre todo..., jaja) Gracias por el post!!! Buen Finde!!! :)

    Jose Luis LLuelma, ROTA - CÁDIZ - SPAIN (http://buenosclicks.com/)

    ResponderEliminar
  5. Ayer me ví a mi misma limpiando una cacerola que parecía que se me iba la vida en ello. Conseguir eliminar las manchitas más inalcanzables suponía llegar a un oasis oculto de felicidad, sólo al alcance de unos pocos sufridores. Desde luego gané la batalla en la cocina, pero como en toda batalla, con muchas pérdidas innecesarias. La cantidad de tiempo, pensamientos y energías que había dejado en ello no me hicieron sentir feliz, sino tonta de remate. Paradójicamente esa misma noche el mio babbino caro era el que fregaba esa misma cacerola: 30 segundos, 0 estrés y a ser feliz. Ahí fue realmente cuando tomé conciencia de cómo funciono en la vida. Me desgasto en la perfección, en llegar hasta el detalle del detalle, en pensar que eso me "dará" (que no "da") los resultados que quiero, y finalmente seré feliz. No obstante, como dices Vero, esa cacerola de vida que llevo nunca me ha permitido vivir lo que sueño, y sinceramente pienso que esa cacerola de vida sólo es maquillaje de mis miedos más profundos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Cristina...qué bueno buenísimo tu comentario!!!! Qué manera de explicar las cosas tan gráfica y tan bien!!!
      Con tu permiso me quedo con eso de..."el maquillaje de mis miedos más profundos"...

      Por cierto, una cacerola es sólo una cacerola... ;))

      Eliminar
  6. si disfrutas con ello, ya es perfecto. Cosa imposible si nos comparamos unos con otros, como dice José Luis.

    un post... perfecto ;)

    besazo

    ResponderEliminar
  7. Uff un gran post, me veo reflejada mucho en lo que has contado, voy muy deprisa a todos lados, aveces soy bastante perfeccionista en todo lo que hago y es verdad se llega a la fustración, baja estima ... tengo poca paciencia, voy a tomarme unos meses para mí, para pensar, para estar tranquila, relajada, descansar y para conocerme mas, gracias por tu blog y por tus post, eres una gran ayuda para todos.

    ResponderEliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...